Una luz cegadora, un disparo de nieve, intensidad de café y menta...
es como si el ojo de su mano se deshiciera en serpientes que te atan
haciéndote empujar hacia arriba buscando aire fresco del norte.
Pedacitos de limón dibujan el camino hacia sus ojos marrones, como la tierra
en la que la que crecen las más preciosas flores. Este sueño ambulante y yo nos conocimos
al alba, sin nada en las manos.... recuerdo acababa de ver un espectáculo de circo, y ella también,
hace poco menos de un año.. y desde entonces me fascina, es ilustrar como con aire alrededor las estrellas y la luna el sol y los planetas, cosas para mi desconocidas hasta nuestra primera conversación... La idea de belleza, similar a la de bien y justicia... me encanta bailar ye-yé con Klarita.
Para mi queridísima Klara Bonilla. te quiero mucho.
